Maldito Monsanto

La aprobación comercial de "Engineered Bentgrass" se da a pesar de esfuerzos fallidos para detener su propagación en parcelas viejas del experimento, según una publicación del sitio Center for Food Safety. La Agencia de Protección del Medio Ambiente publicó una declaración de impacto ambiental final dando luz verde al creeping bentgrass ingeniería genética, una hierba altamente invasiva diseñada genéticamente por Monsanto y Scotts para soportar lo que normalmente sería una dosis letal del herbicida glifosato. Scotts presentó una petición similar en 2002 con la intención de venderlo a los campos de golf profesionales. Pero sabemos de antemano que el negocio es redondo para canchas de fútbol, golf, hockey, polo, y todo cuanto necesite césped, ahora con glifosato. No le bastó a la empresa Monsanto envenenarnos la comida, el agua, el aire, sino que aquellos lugares de esparcimiento cuyo césped ya eran fumigados con glifosato, desde hace rato, pese a no ser GE, ahora lo serán, como los mosquitos, como el salmón y... ¿qué sigue? ¿También el pasto tendrá patente? Décadas de experimentos al aire libre han demostrado que la hierba es imposible de controlar, ya que se escapó de parcelas "controladas" e invadió acequias, márgenes de ríos y pastizales, desplazando a las plantas nativas y la fauna que depende de ellos. A pesar de más de una década de esfuerzos y millones de dólares, el Departamento de Agricultura, Scotts y Monsanto de Estados Unidos no han podido exterminar esos escapes. Ahora USDA ha aceptado la solicitud de la industria. "La aprobación de esta hierba por ingeniería genética del USDA es tan peligroso como ilegal", dijo George Kimbrell, abogado senior del Centro para la Seguridad Alimentaria. "La agencia está dando a Monsanto y Scotts un pase gratuito para el daño que su producto ya ha causado a los agricultores y al medio ambiente, y está jugando irresponsablemente sobre un daño futuro en promesas vacías". El bentgrass GE ya ha contaminado de manera ilegal al menos tres condados, y las semillas de la hierba ultraligeras y su polen han demostrado que es imposible de erradicar. Los agricultores y los expertos de plantas nocivas en el este de Oregón han sido críticos de la propuesta de aprobación de la hierba. En respuesta a la contaminación generalizada, GE creeping bentgrass se declaró una maleza nociva en el condado de Malheur en 2016. Con esta responsabilidad la aprobación para el control de la contaminación se traslada ahora a partir de la USDA, Scotts y Monsanto a ser exclusivamente el problema de los agricultores y propietarios individuales. "Sólo las lágrimas me hacen pensar en los estragos ambientales y económicos que esta hierba podría causar a nuestra comunidad", dijo Jerry Erstrom, agricultor y presidente de la junta de malezas del Condado de Malheur. "El USDA ha ignorado las preocupaciones de los agricultores en las zonas afectadas por la contaminación existente. No puedo creer que van a permitir y dejar Scotts y Monsanto que sigan haciendo lo que ya hicieron aquí". A diferencia del USDA, el Servicio de Pesca y Vida Silvestre de Estados Unidos ha reconocido el peligro de la GE hierba y su probabilidad de propagación fuera de control, llegando a la conclusión de que si se aprueba pueda resultar peligroso para la supervivencia de la especie en peligro de margarita Willamette y lomatuim de Bradshaw y perjudicar el hábitat de la mariposa azul de la Fender en peligro de extinción y la margarita Willamette. "Esta escandalosa decisión de los reguladores de ignorar el daño permanente a los agricultores de Oregon, las especies amenazadas y el paisaje precioso que todos comparten es un recordatorio inquietante de que los reguladores federales no piensan principalmente en los contribuyentes y ciudadanos, sino más bien en los deseos de las corporaciones como Monsanto y Scotts ", dijo Lori Ann Burd, director del programa de salud ambiental en el Centro para la Diversidad Biológica. "Los que estamos dedicados a proteger los recursos naturales de Oregon exploraremos todas las opciones legales necesarias para un control de esta maleza invasora de vuelta a donde pertenece -en los hombros de los especuladores corporativos que lo trajeron al mundo.