El magnate que recibió a Macri es accionista de Edenor

Presidencia de la Nación La visita de Mauricio Macri a la estancia del magnate inglés Joe Lewis sigue generando controversias. Uno de los allegados del dueño de la hacienda en Lago Escondido, Río Negro, admitió que Macri es amigo personal del dueño del Tottenham Hotspur desde hace una década y que viajó hasta allí con un helicóptero de su propiedad, pero que no fue pagado por Presidencia de la Nación. A su vez, el holding de Lewis reconoce inversiones en las empresas Pampa Energía, propietaria de Edenor, y Transener, que deben estar bajo la atenta mirada regulatoria del Estado, por lo que pone la visita de Macri en una situación de conflicto de intereses. Por una situación similar, el ex vicepresidente Amado Boudou fue acusado de dádivas en la justicia federal. LEE MÁS Por radio El Mundo, Nicolas Van Dittmar, allegado del multimillonario dueño de la estancia Lago Escondido, admitió que "Mauricio (sic) es amigo de la familia hace 11 años y ha venido de visita en diferentes oportunidades". En todo ese lapso, Lewis debió enfrentar a la Justicia local por no permitir el acceso al Lago Escondido, que se encuentra dentro de los límites de su propiedad y con acceso vedado al público. Allí, Van Dittmar reconoció que Macri viajó en una empresa de aviación propiedad de Lewis y que el viaje "no se facturó a Presidencia". Es decir, no fue el Estado nacional que abonó por el servicio y sí un tercero. El Mundo La situación se torna más compleja cuando se observa que la camaradería entre el millonario y el presidente de la Nación se da en un contexto en donde Lewis invierte en empresas licenciatarias del Estado. Según reporta en su propio sitio web, el holding Tavistock, propiedad del británico, posee acciones de la firma Pampa Energía, cuyo dueño principal es Marcelo Midlin. Pampa SA es, a su vez, accionista mayoritaria de Edenor, una de las dos empresas que distribuyen la energía eléctrica en la Ciudad y el conurbano bonaerense y se vio beneficiada este año con un suculento aumento de las tarifas. A su vez, Tavistock posee parte del paquete accionario de Transener, que tiene a su cargo las redes de alta tensión del país. Todas empresas que deberían estar bajo la firme vigilancia del Estado nacional, al tratarse de mercados monopólicos.